En el país están pasando cosas extrañas
Un senador panista comentó ayer que en el país estaban pasando muchas cosas extrañas, malas, y que necesitaba tiempo para procesar, para intentar entender. Muchos compartirán la postura del legislador, sobre todo por la suma de hechos registrados en las últimas horas: la suerte que corre Diego Fernández de Cevallos, el casi mítico Jefe Diego, considerado por la PGR en calidad de desaparecido; el asesinato de un abanderado del blanquiazul junto a su hijo y un empleado; el incidente en el que un par de vehículos de la comitiva del candidato priísta a la gubernatura de Chihuahua, César Duarte, fueron rafagueados por elementos del Ejército, y la oleada de presuntos sabotajes a la red de suministro eléctrico en el Distrito Federal. Eso sin considerar la alta cuota de sangre que cobró ayer la guerra contra el narco, especialmente en un bar de Torreón en el que presuntos sicarios masacraron a ocho y dejaron heridos a otros 19. Muchos estarán de acuerdo con el senador.
Por cierto, pese a la desaparición de Fernández de Cevallos, el Partido Acción Nacional no contempla modificar la fecha de su asamblea nacional del próximo sábado 22. El blanquiazul no cambiará lo ya planeado para su cónclave porque, nos cuentan, implica demasiada logística, costos y reunión de funcionarios. La renovación total del Consejo Nacional aglutinará a más de 10 mil panistas en la ciudad de México el próximo fin de semana.
Conocido por su vocación dicharachera, el senador panista Gustavo Madero volvió a hacer de las suyas en Puebla, estado al que viajó para apoyar al candidato de la alianza PAN-PRD-Convergencia-Panal a la gubernatura, Rafael Moreno Valle. En San Andrés Cholula, el legislador dijo que le gustaría adelantar el reloj de la historia en la entidad, “porque lo han atrasado los priístas ‘picapiedra’ que quieren mantener en la premodernidad el desarrollo de este estado”. Habrá que esperar unas horas para saber el tono e intensidad de la respuesta de los aludidos.
A lo largo de la semana creció la polémica en torno al personaje que debería dirigir la Agencia Espacial Mexicana. Fernando de la Peña, empresario que se mueve en el medio académico, defendió en algunos medios de comunicación su derecho a estar al frente del proyecto. Criticó a Rodolfo Neri Vela, primer astronauta mexicano, por desacreditarlo y afirmar que no tendría la capacidad para encabezar la nueva institución. El asunto crece y el tema ya llegó a oídos del presidente Felipe Calderón, quien tiene la atribución de proponer a quien se hará cargo de tan ambicioso plan espacial que, por cierto, sólo cuenta con un fondo de 10 millones de pesos. Así las cosas, la nueva agencia todavía no acaba de cuajar y ya comienza a tambalearse por los jaloneos de grupos que buscan apoderarse del control. Ya en este espacio hablamos de la batalla que se libra por la dirección del centro, y en la que también está involucrado el astronauta mexicano-estadounidense José Hernández, quien, se dice, pugna para que su compadre Fernando de la Peña quede al frente de la agencia.
Apunte final: Para los que cuestionan la calidad de la información que se “mueve” en las redes sociales y la proclividad de algunos a “subir” literalmente lo que sea, Manuel Espino les regaló ayer una verdadera perla. El panista escribió en su cuenta de Twitter, poco después de las 15 horas y a propósito de la desaparición del Jefe Diego, que “me dicen que en efecto está muerto y que su cuerpo fue encontrado en un campo militar de Qro”. Minutos después, a través del mismo medio, aclaró: “Sólo la puede confirmar el Ministerio Público, les comparto lo que me dicen amigos q han hablado con algún familiar de DFC”. De ese tamaño.
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