Ciro Pérez Silva
Enviado
Yajalón, Chiapas, 10 de mayo. Andrés Manuel López Obrador comenzó ayer en Chiapas las giras de apoyo a los candidatos a la Cámara de Diputados por los partidos Convergencia y del Trabajo, y ante poco más de 500 personas reunidas en el parque principal de Palenque, advirtió que el movimiento que encabeza no es trampolín político ni tiene como único propósito la búsqueda de espacios de representación popular.
“Este movimiento tampoco es un eslabón para que se encaramen unos ambiciosos en los puestos públicos, menos aún es el ‘quítate tú porque quiero yo’, si ese fuera el objetivo no tendría ningún caso que siguiéramos en esta lucha, que es por la transformación de la vida pública de México y que se explica con una frase, ¡arriba los de abajo! ¡arriba los pobres y abajo los privilegios!”
Admitió que quizá no sean muchos los diputados federales que representen a los partidos que conforman el Frente Amplio Progresista (Convergencia, PT y PRD) en la próximo legislatura del Congreso de la Unión, pero manifestó su confianza de que quienes lleguen van a defender las causas que dieron origen a este movimiento.
“Puede que no sean todos, pero no hace falta que sean muchos, basta que sean leales, fieles y comprometidos con las causas justas y que representen los intereses de la mayoría, que es el pueblo. Quizá no serán muchos, pero sí serán mejores”, enfatizó.
En el parque principal de Palenque, el abanderado por Convergencia al primer distrito, Jorge Isaac Lastra Lacroix, mencionó a su vez que el próximo 5 de julio se tiene la posibilidad de cambiar, mediante el voto, el destino del país. “Existen dos tipos de candidatos en este proceso: los lopezobradoristas y los candidatos del presidente pelele, Felipe Calderón. No tenemos que votar por los mentirosos, por quien dijo, por ejemplo, que iba a ser el presidente del empleo y no lo fue”, apuntó.
Más tarde, en Yajalón, donde se reunieron en la plaza principal más de 2 mil personas, el tabasqueño aseveró que no es posible esperar que el cambio que requiere el país llegue de arriba para abajo, “sólo el pueblo puede salvar al pueblo, el cambio se va a dar de abajo para arriba”, sostuvo López Obrador.
Si no hay ese cambio, apuntó, “no vamos a ganar nada”. Insistió en que todo lo que pasa a escala nacional en materia económica, social y política lo advirtió en 2006, cuando subrayó que era necesaria una transformación de la vida pública.
“Vean lo que está pasando ahora, hay más desempleo, la economía está en ruinas y se está disparando la violencia, ya estamos cansados de políticos chafas, que nada más vienen a pedir el voto y cuando lo consiguen, no vuelven a acordarse de la gente, ya no queremos más al político fantoche, corrupto y ladrón”, dijo.
Recordó entonces que gracias al movimiento que encabeza, se logró no sólo detener el intento privatizador de la industria petrolera que impulsó “el pelele de Calderón”, sino otros logros, como el apoyo para adultos mayores, becas para los estudiantes de preparatoria y madres solteras.
López Obrador advirtió, en los municipios que recorrió ayer, que sus adversarios políticos “tienen un truco bien ensayado, primero empobrecen al pueblo y luego, en vísperas de las elecciones, entregan despensas, materiales de construcción y hasta compran el voto, hay que hacer conciencia en la gente de que lo que dan es pan para hoy y hambre para mañana y que el pueblo ya no está para limosna”.
Luego López Obrador se trasladó al municipio de Bachajón, donde se reunió con 2 mil indígenas tzeltales, a quienes les reiteró que el movimiento que encabeza no va a apoyar a candidatos “que sólo van a calentar la curul, a tomar café con galletitas, a cobrar grandes salarios, a darse la gran vida y a corromperse, a esos que luego de ganar el voto no se les vuelve a ver la cara en las comunidades”.
El tabasqueño continuó su gira por Ocosingo y Comitán, a cuyos habitantes les dijo que va a impulsar en el Congreso de la Unión una propuesta para garantizar a los productores de café un precio de garantía por el producto, porque se trata de apoyar a estados como Hidalgo, Oaxaca, Veracruz, Guerrero y el mismo Chiapas, donde se cultiva este producto y en los que, paradójicamente, viven las comunidades más marginadas, integradas especialmente por indígenas.
Por ello, se pretende, entre otras cosas, evitar que los jóvenes migren por la falta de oportunidades y empleo. Este lunes el tabasqueño continuará su gira por los municipios chiapanecos de San Cristóbal de las Casas, Bochil, Acalá y Ocozocuautla.
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