martes, 23 de diciembre de 2008

Fe panazi : Hipocresìa y cinismo : "La mentada no le hizo daño a nadie"

Emilio González admitió que fue algo inadecuado, pero sólo un asunto anecdótico

La mentada de madre que el gobernador de Jalisco, Emilio González Márquez, profirió a sus críticos la noche del 23 de abril pasado fue algo inadecuado tratándose de un personaje público, pero al final queda en algo anecdótico y “a nadie le pasó nada por eso”.

Tal fue la conclusión a la que llegó el mismo gobernador del estado cuando, en entrevista colectiva con los reporteros de la fuente, se le pidió que hiciera un balance de lo que implicó la mentada de madre expresada el 23 de abril durante el Banquete del Hambre que se llevó a cabo en Expo Guadalajara. El contexto, como se recuerda, estaba dominado por las críticas al donativo de 30 millones de pesos entregado para la construcción del Santuario de los Mártires, al que luego se sumarían otros 60 millones.

“En el asunto de la mentada. Fue algo inadecuado que en su momento ofrecí disculpas y que no ha tenido mayor impacto […] No me enorgullezco, creo que todos lo hacemos, pero no está bien. Creo que una persona pública tiene que guardar un lenguaje, independientemente de que en la vida privada o cuando vamos al futbol o a las luchas todos lo hagamos, pues sí esperamos que un gobernante no lo haga”.

Recordó que al día siguiente de que lanzara esa sonora expresión ofreció disculpas, pero insistió en que fue algo anecdótico. “Me equivoqué y quedó como algo en la anécdota que, gracias a Dios, no tiene ningún impacto en el gobierno y no tiene ningún impacto en la calificación hacia el gobierno. Si acaso me hizo más conocido, pero no es algo que yo busco, no que digo que esté bien, ni que digo que quiero volver a hacer”.

Emilio González se extendió al momento de insistir que fue una expresión que “no tuvo impacto en las inversiones, no tuvo impacto en la generación de empleos, no tiene nada que ver con la calidad del aire, o con la movilidad. No tiene nada que ver con nada”.

Y agregó: “No le hizo daño a nadie. Es una anécdota en la vida de Jalisco. Digo, no me doy tanta importancia como para decir que eso marca un antes y un después, no. Es un incidente anecdótico que no tiene un impacto en la calidad de vida de los jaliscienses. Si lo hemos de medir como una decisión que impacta, es irrelevante. Inadecuado pero irrelevante. A nadie le pasó nada por eso”.

Si la famosa mentada ha llamado la atención, consideró el gobernador, es “que alguien que dijo esas palabrotas es alguien que sale en los periódicos, en la radio, en la tele y por lo tanto no estamos acostumbrados, y no lo defiendo. No es correcto, pero no tiene ningún impacto. ¿Fue muy conocido? Sí, pero no le cambió, para bien o para mal, su calidad de vida”.

Emilio González minimizó además que ese incidente hubiera erosionado la credibilidad de los gobernantes ante los ciudadanos (pese a que hubo diversas muestras de repudio e incluso se fabricaron calcomanías con frases como “Chinga a la tuya”). “Si en un evento donde hay dos mil personas cinco censuran y 1,995 aplauden y enfocamos la censura, parecería que sí. Igual podríamos enfocar el otro [lado], es parte de una misma realidad”.

Al contrario, sostuvo que todas las mediciones lo califican bien a grado tal que ahora tiene un nivel de aceptación que esperaba conseguir hasta el siguiente año. “La calificación que traigo ahora indica que estoy muy por encima de […cuando] en su momento votaron por mí”.

En la entrevista colectiva ofrecida el viernes, se le preguntó también sobre su relación con su partido, Acción Nacional, y con el Poder Legislativo. “Mi relación con el PAN siempre ha sido buena, es de respeto, es la de un militante panista que tiene un cargo de alta responsabilidad hacia el partido que lo impulsó y lo formó”, respondió.

Respecto a su relación con el Congreso del Estado, tirante en no pocas ocasiones en estos casi dos años de gobierno, Emilio González afirmó que es un político “heterodoxo” que ha propiciado la separación de poderes. Un gobernante, añadió, “que no busca someter ni ser sometido y en esta relación se generan fricciones naturales que tienen como saldo positivo separación y equilibrio de poderes. Yo creo que nadie puede decir con argumentos que el Legislativo está sometido al Ejecutivo, nadie lo puede decir, y se podrá criticar mi forma de hacerlo peroes el resultado que me propuse para que exista la independencia y el equilibrio de los poderes”.

Según él, “nunca como ahora hay estos debates y divergencia entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo, nunca como ahora también el Poder Judicial incidiendo en las decisiones del Ejecutivo. Hemos logrado tener un gobernador y no tenemos más un semidiós. No aspiro a serlo, no trabajo para ello y por el contrario, soy el primero que trabaja para acotar al Ejecutivo”.

A viva voz

Emilio González
“La calificación que traigo ahora indica que estoy muy por encima de [… cuando] en su momento votaron por mí”.

“Busco ser un gobernador, no ser un semidiós”

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