viernes, 2 de octubre de 2009

Los últimos minutos de fama de "Juanito"


GLORIA LETICIA DíAZ
MÉXICO, D.F., 1 de octubre (apro).- Rafael Acosta Ángeles Juanito tardó más en llegar a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) y en rendir protesta como delegado de Iztapalapa que en firmar su solicitud de licencia por 59 días --"por motivos de salud"--, para ceder su lugar a la perredista Clara Brugada.

Antes de formalizar la entrega de la licencia, en pleno juramento, Juanito aprovechó sus últimos minutos de fama y los reflectores para renegar de su partido: "¡Muera el PR, el PT, traidor!", gritó.

Acosta llegó a la sede de la legislatura a las 10:30 horas custodiado por seis policías vestidos de civil que lo escoltaron a la oficina de la fracción del PT, partido que lo postuló como jefe delegacional, donde esperó por más de una hora. Después, fue conducido junto con el resto de los delegados al pleno de la ALDF para la toma de protesta.

Cual pugilista, antes de tomar el asiento que se le reservó, Juanito posó para las cámaras alzando los brazos y mostrando los puños, mientras, desde gradas del primer piso y las curules del PAN se escuchaban gritos de apoyo: "¡Duro, duro!" y "¡No renuncies!"

Atrás, en el área reservada para el gabinete del gobierno capitalino, la depuesta excandidata del PRD, Clara Brugada, y el secretario de Gobierno, José Ángel Ávila, representante del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard en la ceremonia, observaban serios el espectáculo de Acosta Ángeles.

La atención de invitados y prensa estuvo puesta en el personaje que durante un mes mantuvo en vilo el destino de la delegación más grande de la ciudad.

EL pasado martes 28, la zozobra terminó: Luego de reunirse con el titular del GDF Juanito anunció que dejaría el cargo, "por motivos de salud" y que nombraría a Brugada como directora Jurídica y de Gobierno, con el fin de que lo sucediera en el cargo.

Vinieron después los posicionamientos de las fracciones legislativas, tiempo que Juanito aprovechó para charlar, animado, con el delegado de Cuajimalpa, el panista Carlos Orvañanos Rea, quien apenas el 28 de septiembre fue rescatado por la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), de la anulación de la elección que dictara el Tribunal Electoral del Distrito Federal.

Acosta Ángeles interrumpió su plática con Orvañanos cuando el diputado panista Rafael Miguel Medina Pederzini se refirió a él llamándolo "tocayo".

"En tres años –dijo Medina en su intervención— nos encantaría felicitar a mi tocayo Rafael Acosta cuando llegue el agua a Iztapalapa, acabe con el narcomenudeo y disminuya la violencia. Un Juanito que cumpla con las exigencias de los que votaron por él y no las exigencias de un grupo de mafiosos que lo único que quieren es un botín."

Las palabras del panista, enardecieron al diputado perredista José Luis Muñoz Soria, exdelegado de Cuauhtémoc y allegado a René Bejarano, quien exigió al presidente de la Mesa Directiva, el panista Carlos Alberto Flores, que "le pidiera al representante del PAN que no asumiera "actitudes provocadoras".

Desde la bancada del PAN le recordaron a Muñoz Soria, que para expresar lo que quieran, "los diputados tienen fuero", en tanto que Flores le recomendó leer el Reglamento Interno para el Gobierno Interior de la Asamblea.

Juanito causó expectación cuando le tocó su turno para rendir protesta, acto en el que le antecedió el perredista de Iztacalco, Francisco Javier Sánchez Cervantes.

Con la mano derecha en alto, Acosta Ángeles leyó en una hoja puesta en un atril las frases protocolarias, y al término, vacilante, repudió a su partido: "¡Muera el PR… PT, traidor!". Después se quitó la corbata roja que portaba y la pisoteó, acto que desató una guerra de aplausos y abucheos: los panistas celebraron la actitud de Juanito; los perredistas, rechiflas.

Al término de la sesión, casi en vilo, Juanito fue escoltado hasta la oficina de la presidenta de la Comisión de Gobierno de la ALDF, Alejandra Barrales, donde ya lo esperaba José Ángel Ávila con documentos listos para que el efímero jefe delegacional de Iztapalapa los firmara: Su solicitud de licencia por 59 días "por motivos de salud", y el nombramiento de Clara Brugada como directora Jurídica y de Gobierno, a quien dejó como "encargada de despacho".

Ávila Pérez –cuya comparecencia fue cancelada por el presidente de la Mesa Directiva ante la falta de quórum, sólo hubo una reunión con diputados del PRD-- confirmó en entrevista que como representante del jefe de Gobierno, autorizó la licencia de Acosta Ángeles, y agregó que al término de su participación, acudiría a Iztapalapa a tomar protesta a Clara Brugada.

Ataviada con un traje sastre amarillo, Brugada dijo estar "feliz", y aclaró que "siempre" confió en Juanito "Un hombre valiente cumple con el pueblo de Iztapalapa", afirmó.

Mientras era abordada por la prensa, en medio de gritos: "¡arriba Juanito!", Brugada aseguró que en los próximos días se dará a conocer la conformación del gabinete delegacional, en el que "el equipo de Acosta" está contemplado.

Antes de ingresar al recinto de la ALDF, Rafael Acosta aseguró que como parte de los acuerdos con el jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, para su gente reservó las direcciones de Desarrollo Delegacional y Desarrollo Social, así como las direcciones territoriales de Aculco, Cabeza de Juárez y Ermita-Zaragoza, nombramientos que, dijo, fueron entregados por escrito la noche del miércoles 30 en la Secretaría de Gobierno del Distrito Federal.

Juanito salió de la Asamblea sin poder ser entrevistado por los medios de comunicación para que explicará el motivo de su reproche al partido que lo impulsó como delegado, grito que podría derivar en su expulsión del PT.

Según el coordinador del PT en la Cámara de Diputados, Pedro Vázquez, en la reunión de la Junta de Dirección Nacional se tratará el tema.

"Si él (Juanito) planteó públicamente en tribuna esa afirmación injuriosa, se va a quedar con el gusto de plantearlo públicamente porque el partido no se va a morir", dijo el legislador

Señaló que el PT no le debe nada a Juanito ni él al partido, y recordó que Acosta "tenía la intención de la candidatura, se le dio el espacio, se generaron las condiciones, se le apoyó en la campaña, el resultado fue que él quedó electo y hoy las condiciones son para que él cumpla con lo que pactó en una asamblea pública en Iztapalapa".

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