martes, 21 de diciembre de 2010

Secuestro medíatico-Hernández

Lágrimas negras-Rocha

¿Y Marisela, y San Martín, y...? Julio Hernández López

Astillero
Misteriosos Aparecedores
Precandidato automático
Purificación televisiva



Fue un arribo escenográfico de consecuencias previstas. Larga barba comprobante de los meses de obligado descuido estético, aunque el cabello no mostraba concordante crecimiento y desaliño; gran cobertura mediática, sobre todo televisiva, para difundir las primeras consideraciones de aquel a quien los reporteros preguntaban, sin respuesta, si buscaría o aceptaría ser candidato presidencial, y el clarísimo enfoque político del discurso del panista ya en libre circulación al que un pasaje de El Quijote parecía servirle de plataforma de lanzamiento hacia nuevos episodios políticos, específicamente la contienda presidencial de 2012.
Diego restituido, recuperado, reciclado. De los Misteriosos Desaparecedores a los misterios de la reaparición. La fraseología de izquierdismo simplista como telón ideal de fondo para adjudicar la ausencia física sietemesina a los peligros para México que constituyen quienes comparten ese manual básico de la inconformidad. Caricaturización de la disidencia, con injertos de posturas de López Obrador y Marcos, entre otros: del Nosotros los pobres y ustedes los ricos al análisis-denuncia parcial y elemental, enderezando las baterías contra izquierdistas y priístas y condenando al mártir del coyotaje de superlujo al paredón de las descalificaciones sumarias en comunicados cuya carga crítica fue arrasada en cuanto los poderosos medios televisivos decidieron purificar a Diego de su denso historial para convertirlo en héroe del momento, en síntesis de virtudes cívicas y ejemplo nacional de lucha contra los muchos males actuales, al extremo en Foro Tv, de Televisa, de proponer movimientos sociales de unidad nacional y firma de pactos sobre seguridad pública con el panista como eje convocante y figura inspiradora.
Diego sin evidencia de traumas posteriores al secuestro ni dificultades para subirse con agilidad al carrusel de la realidad política nacional que cambia con fuerza día a día. Claridad de análisis y contundencia declarativa apenas afectada por problemas de la garganta. Listo para seguir siendo el mismo y continuar en la lucha. Gracias a la Virgen y a Dios. Hombre de fe que perdona. Llamada telefónica con el ocupante de Los Pinos (que ayer pudo haber perdido la capacidad de instalar pieza propia hacia 2012). Ramo de rosas rojas del caballero nuevamente andante para llevarlo a la novia en auto por él conducido. Sus palabras repetidas una y otra vez en las televisoras de programación informativa continua. Entrevista especial con el titular de un programa de Radiofórmula, José Cárdenas, a quien aseguró que diría lo mismo que esa misma noche frente a Joaquín López Dóriga en el noticiario estelar de Televisa, entre otras cosas, que su desaparición física fue motivada por razones económicas, “pero también tuvo una marcadísima connotación política, supuestamente por cuestiones ideológicas”. Político con “tranquilidad de conciencia” porque siempre ha luchado “por mis ideales, siempre en Acción Nacional, siempre por México”, lo que no “vieron así” los Misteriosos Desaparecedores, pues “ellos me consideraron un enemigo de sus causas”.
Diego precandidato aun cuando él no lo quisiera y aun cuando ésa fuese una consecuencia no deseada por quienes prepararon su misteriosa desaparición. Es, ya, el paladín de la lucha de la sociedad mexicana contra la delincuencia desbordada. ¿Quién mejor que él para enfrentar con mano dura, discurso firme y experiencia propia lo que los mexicanos padecen hoy? Diego no es ni será más el litigante que se ha beneficiado del tráfico de influencias para ganarle millonarios pleitos al propio Estado, ni el personaje que desde el Senado o en los arreglos con Los Pinos salinistas fue montando una red de intereses en el Poder Judicial y en el aparato de procuración de justicia que acabó beneficiando a su propio bufete y a su propia cartera de clientes de elite que han saqueado al país desde sus trajes de etiqueta, sus cuellos blancos. Hoy, ya, Diego ha sido liberado de esas culpas gracias a la magia televisiva, al periodismo acrítico y convenenciero, a la desmemoria nacional y a los planes políticos que necesitan “estabilizar” las elecciones de 2012 mediante contendientes “confiables”, “civilizados”, que sean capaces de dejarse ganar unos comicios, como lo hizo Fernández de Cevallos frente a Ernesto Zedillo en 1994, o aceptar el amable arbitraje del Señor de las Cunas por él mecidas, el también liberado y reaparecido Carlos Salinas de Gortari a quien mucho alegraría jugar en la próxima contienda con cartas propias, cercanas, influenciables o negociables. ¿Qué tal un 2012 con el favorito Peña Nieto como apuesta principal, con Diego como opción secundaria que en dado caso sea capaz de “aceptar” desenlaces que le fueran desfavorables y con un Marcelo movido por el antiguo compañero de armas salinas, Manuel Camacho? Dieciseis años atrás fue el llamado “error de diciembre” y ayer, caprichoso como puede ser el calendario, Salinas podría haber celebrado su acierto de diciembre.
El espectáculo del nacimiento de un precandidato anunciado desplazó oportunamente cuando menos tres temas causantes de irritación y preocupación nacionales. Marisela Escobedo fue sepultada mediáticamente, flor periodística de unos cuantos días, asesinado uno de sus cuñados, incendiada la maderería de quien fue su pareja y necesitados de protección sus hijos a los que el Estado cuida con la misma contundencia retórica instantánea que a la madre denunciante y luego ejecutada. En San Martín Texmelucan los directivos de Petróleos Mexicanos pelean con la realidad para culpar a misteriosos saqueadores de provocar explosiones y eludir culpas oficiales. Y en Tamaulipas la escandalosa fuga de más de 150 presos es burocráticamente atenuada con la consignación de celadores. Y, mientras el sacerdote Alejandro Solalinde es amenazado en Ixtepec, Oaxaca, por mafias traficantes de migrantes y autoridades que son cómplices (en http://bit.ly/hxZffN puede leerse una entrevista con él), ¡hasta mañana, en este cierre de diciembre negro!
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx

2010, uno de los peores en la historia de México: AMLO


El presidente legítimo de México reprochó que pese al crecimiento de la crisis en la economía, en el empleo, en la seguridad y el crecimiento de la pobreza, en este año “los que mandan en el país” no han tenido el interés en que se quiera cambiar la política.

Andrés Manuel López Obrador consideró al año 2010 como uno de los peores en la historia de México, porque se agudizaron los problemas que han llevado a la descomposición social.

En entrevista con el periodista Carlos Puig, el presidente legítimo de México reprochó que pese a que en este año se profundizó la crisis en la economía, en el empleo, en la seguridad y el crecimiento de la pobreza, "los que mandan en el país" no han tenido el interés en que se quiera cambiar la política; de rectificar.

Cuestionado sobre los dichos de que el cambio no viene porque falta capacidad de ponernos de acuerdo, Andrés Manuel reviró que el Ejecutivo no ha llevado una propuesta diferente al Congreso.

No hay una propuesta que vaya encaminada a combatir la corrupción, la pobreza y la inseguridad; "sólo hay una sopa, no hay otra cosa, esa es una cantaleta y le siguen", dijo.

El político habló sobre los comités ciudadanos, cuya tarea tiene el sumar a personas que simpaticen con el Movimiento; aquellos que estén convencido que hace falta un cambio.

Sobre la liberación de Diego Fernández de Cevallos, Andrés Manuel manifestó su congratulación y consideró a panista como un adversario, no un enemigo.

En cuanto a las elecciones en el estado de México, aseguró que el Movimiento participará, y reiteró su desacuerdo con una posible alianza con el PAN.

Aseguró que la mafia de poder domina al PRI y al PAN, por lo que una alianza no traería el cambio verdadero que necesita el estado de México.

Fuente: SDPnoticias

La supuesta "liberación" de Diego

David y Rodrigo Fernández de Cevallos Secuestran" a nietos de Diego Fernández de Cevallos en Cozumel


COZUMEL, Q. Roo.- Apoyados por elementos de la Armada y de la Sedena, David y Rodrigo Fernández de Cevallos arrebataron los menores a su madre.


Gustavo Villegas/David Camacho/SIPSE
COZUMEL, Q. Roo.- Los gritos desgarradores de Jimena Mari-Fouche se escuchaban hasta la calle mientras luchaba con elementos de la Secretaría de Marina y la Defensa Nacional para evitar que le arrebataran a sus dos hijos, uno de año y medio y otro de cuatro. Los infantes son nietos de Diego Fernández de Cevallos.

Los militares recibían órdenes de tres personas vestidas de civil para evitar que se tomaran fotografías de un operativo que hubiera hecho palidecer al implementado en la captura de un capo de la droga en México.

Minutos antes de las 19 horas corrió como reguero de pólvora la noticia de un fuerte despliegue de elementos castrenses en la 50 avenida entre 11 y 13. Todos abastecidos con armas larga y de grueso calibre. Por las características del operativo, inicialmente se habló de la detención de narcotraficantes y posteriormente de ejecutados.

La realidad era que David y Rodrigo Fernández de Cevallos, hijos del "Jefe Diego", llegaron armados a Cozumel para llevarse a los infantes, producto de la unión entre Jimena y David.

El oficial de más alto rango en la movilización militar era Sergio Ricardo Martínez Ruiz, comandante de la Guarnición Militar en Cozumel.

Los militares entraron a la casa y según testimonios de la agraviada y sus familiares, les arrebataron a los menores y provocaron daños en el interior de su residencia.

Tras un lapso de 30 minutos, los dos menores fueron introducidos a una camioneta tipo Van. Varias personas en el interior los cubrían y partieron con rumbo desconocido.

Jimena Mari-Fouche se controló un poco para poder hablar con los reporteros a quienes dijo que David se aprovecha de la ausencia de su padre, quien nunca hubiera permitido el abuso del que fue objeto y el "rapto" de sus hijos. Agregó que su ex esposo, tras el secuestro de su suegro, la encerró cuatro meses en Querétaro.

Con la ropa desgarrada y un corte en la parte interna del labio, producto de la lucha por retener a sus hijos, dijo con voz quebrada por el llanto que durante todo este tiempo fue abusada física y psicológicamente.

Previo a su separación, David Fernández de Ceballos fue demandado por violencia intrafamiliar y reveló que su divorcio está en proceso, mientras tanto, un juez le otorgó la custodia de los menores.

"Vine a Cozumel porque es un lugar seguro (...) Aquí quiero criar a mis hijos y ahora me los han quitado con todo este despliegue de fuerza. Soldados ¿para qué? ¡Son niños, por Dios!". Expresó la atribulada madre.

Antes de retirarse dijo a los corresponsales de medios impresos y electrónicos que ambos (David y Rodrigo) estaban armados en el momento de los hechos y que entraron con una supuesta orden de cateo, misma que debe ser falsa, ya que un juez le favoreció en la custodia de sus hijos.

David permanece en la isla con sus dos hijos

Hasta el momento David Fernández de Cevallos permanece en la isla con sus dos hijos. Intentó cruzar a Playa del Carmen en el ferry de las 21 horas, pero no fue posible porque llegaron elementos de la Procuraduría General Justicia del Estado en Cozumel, quienes le solicitaron que se identificara y un documento que avale que pueda llevarse a sus hijos. No pudo demostrarlo.

Trabajadores del ferry, aún se desconoce la empresa, impidieron que se trasladara hasta arreglar la situación legal con sus hijos. Aún no hay explicación de porqué las fuerzas Armadas colaboraron para "secuestrar" a los también hijos de Jimena Mari-Fouche.

La última vez que se le vio a Fernández de Cevallos hijo, fue cerda del restaurante "Las Palmeras" frente al muelle donde operan los ferrys que se dirigen a Playa del Carmen.

David y Rodrigo Fernández de Cevallos Secuestran a los nietos de Diego Fernandez en Cozumel__SIPS

Pemex y PGR: negligencia trágica - EDITORIAL - La Jornada


Hasta ahora se mantienen las sospechas de que la tragedia ocurrida la madrugada del domingo en San Martín Texmelucan, Puebla, fue originada por el robo de combustible en los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) que atraviesan esa localidad. Aunque ayer el director general de la paraestatal, Juan José Suárez Coppel, aportó nuevos elementos que podrían apuntar a un fallo material y no a una perforación ilegal, es un hecho que tanto la empresa que encabeza como la Procuraduría General de la República (PGR) estaban al tanto de la peligrosidad de las instalaciones en ese municipio poblano porque, en un tramo muy corto del ducto colapsado, Pemex había descubierto ya unas 80 tomas clandestinas, en tanto que a consecuencia de una denuncia penal presentada por un grupo de trabajadores petroleros –disidentes de la dirigencia sindical de Carlos Romero Deschamps– la PGR inició, hace seis meses, una indagatoria por los robos de combustible realizados por bandas criminales en San Martín Texmelucan y en otros seis puntos del país.

La vulnerabilidad de las instalaciones de Pemex en general es puesta en evidencia por las 550 tomas ilegales que la paraestatal ha encontrado, sólo en el curso de este año, en su red de ductos, así como por los ataques contra tuberías realizados en julio de 2007 por el Ejército Popular Revolucionario (EPR) en tres puntos de Guanajuato y uno de Querétaro. A esa desprotección, de por sí alarmante, ha de agregarse la precariedad causada por la depredación fiscal que ha venido realizando el gobierno federal contra la empresa y que obstaculiza las labores de mantenimiento y reinversión, así como la corrupción proverbial que prevalece en las cúpulas de la empresa y del sindicato. Tal precariedad se ha traducido, a su vez, en una elevadísima tasa de accidentes de diversa magnitud: 46 en 2008, 439 al año siguiente y 550 en el curso de 2010. Tanto la ordeña de combustibles como las fallas materiales le cuestan al país miles de millones de pesos anuales.

Así pues, haya sido a consecuencia de la acción de la delincuencia o como resultado de fallas de mantenimiento, la catástrofe de San Martín Texmelucan –que hasta anoche dejaba un saldo de más de una veintena de muertos, arriba de medio centenar de lesionados y unos 90 inmuebles afectados, la tercera parte de ellos con pérdida total– habría podido evitarse si a los ductos de Pemex en esa localidad poblana se les hubiese asignado una supervisión técnica regular y una vigilancia policial adecuada, ambas acordes con el riesgo que representan esas instalaciones para la población y con su alto valor material.

Sería exasperante que las obligadas investigaciones –las de índole técnico y los peritajes legales–, que a decir de Suárez Coppel tomarán tres meses, devinieran acto de simulación. Los elementos de juicio disponibles indican que, además de la acción de delincuentes o de fallas mecánicas igualmente inadmisibles, pudo haber, en la génesis de esta tragedia, negligencias penalmente sancionables en varias dependencias del gobierno federal.

La opinión pública no debe permitir que se disuelva en el olvido el sufrimiento por el que atraviesa la población de San Martín Texmelucan en estas horas amargas.

México está en peligro Sergio Conde Varela Abogado


Con esta frase, inicia Carlos Salinas de Gortari su libro “Democracia republicana; ni estado ni mercado; una alternativa ciudadana”. El volumen de 975 hojas,176 de las cuales se refieren a notas bibliográficas en las que se apoya en parte de lo que escribe.

En la promoción de este libro, Carlos Salinas anduvo por todas las televisoras nacionales, dos para ser exactos, Televisa y Azteca y algunas internacionales como CNN y desde luego a una velocidad inaudita, porque el tiraje es del corriente mes y año, apareció en nuestra ciudad, todavía con olor a tinta, en un negocio de Carlos Slim, antes de cualquier otro.

Sería absurdo que les dijera a los lectores que ni teniendo el que esto escribe el mas avanzado curso de lectura dinámica habría leído el corpulento y pesado volumen, pero pensamos que en nuestro caso no era imperioso que se revisara de testa a rabo, porque desde el prólogo, cualquier lector puede encontrar los puntos mas importantes que propone el controvertido autor.

En este libro ahora si quiere que su afirmación de que la justicia, la libertad y la soberanía, sea cierta y que las tres están en riesgo de desaparecer y que nosotros los terrícolas juarenses y mexicanos, se lo creamos. Pues bien, no se lo creemos y de plano le entramos a lo que el propone como debate.

El ex mandatario, pretende asustarnos con el petate del muerto al decir que son grandes los amagos contra la soberanía y que la crisis persista por nuestra cercanía con Estados Unidos a quien llama la nueva Roma( para evitar llamarla imperio).

Desde luego que esto tampoco se lo creemos los juarenses y mexicanos de buena fe, pues sabemos de sus grandes nexos con los grupos de poder económico, como cuando fue consejero de influyente diario The Wall Street Journal. No cualquiera puede llegar a tal puesto, salvo que se hable de tú con los millones.

Con un asombro propio del que no se ha dado cuenta de nada, escribe que el estado mexicano acudió a ayudar a los adinerados y que ese sistema financiero puso por encima del estado a las compañía privadas; ya no se acuerda el que dice que es de corazón de Agualeguas Nuevo León, que su gobierno es ha sido y quizás será el mas representativo del neoliberalismo, incluyendo al de los panistas, que impulsó por doquier y a diestra y siniestra las llamadas privatizaciones, incluyendo las bancarias, de todo tipo de empresas e impulsó y favoreció a los barones del dinero y a los ricos consorcios, los cuales hasta la fecha poco saben del dato que maneja Salinas en su libro que ese sistema produjo 51 millones de pobres, 26 en extrema pobreza.

Trata también lo del narcotráfico y también de asustarnos anotando que 400 municipios de México están en manos del narco, según el dicho del secretario de gobernación y que el narcotráfico es un estado dentro del estado y que eso afecta según su dicho, la esencia misma del estado y que ha pasado de ser asunto policiaco a materia de seguridad nacional.

Después de los supuestos de pánico, Salinas, proyecta para México la fisonomía de la desesperanza. México, dice, es un país de consumo y no de tráfico de enervantes;la economía está estancada y enferma; pésima calidad educativa; la explosión de la pobreza es manifiesta el 10 % de la población absorbe el 41 % del ingreso nacional; que se padece una atrofia institucional y una democracia disminuida.

Después de haber consultado a Maquiavelo, Cicerón, San Agustín y Santo Tomas, llega a la conclusión que la salvación está en la democracia republicana y también la democracia industrial. Para ello tres factores: lucha popular, participación organizada y compromiso social.

Lo propuesto es un eufemismo, disfraz o tapujo.El pueblo no puede hacer mucho pos si mismo. Es un pueblo pobre, la mitad de la población según Salinas. No tiene armas con que luchar ni estrategas bien pagados para la participación organizada. Menos puede comprometerse colectivamente cuando no lo puede hacer familiarmente. En el libro no hay ideas frescas de reconstrucción.Lastima de tantas letras

El crimen de Texmelucan Miguel Angel Granados Chapa Periodista


Distrito Federal— Como en la guardería ABC de Hermosillo, en san Martín Texmelucan se ha cometido un crimen, un asesinato colectivo. En ambos casos se reunieron negligencia, corrupción, codicia e impunidad para generar un resultado atroz, la pérdida de decenas de vidas humanas, que pudo ser evitada si se cumpliera la ley.

En el caso del estallido dominical en el ducto que pasa por aquel municipio poblano, a los vicios administrativos y políticos enumerados se agrega la lenidad social, la laxitud ética de porciones importantes de la sociedad, en México y en el extranjero, especialmente el sur norteamericano y Texas en particular. El crimen de san Martín, el robo de combustibles en general es posible porque hay un mercado negro de ese material, donde compradores y vendedores rompen las normas de la convivencia, no sólo porque comercian con un producto de procedencia ilícita, sino porque la práctica clandestina de horadar ductos para succionar su producto genera un permanente riesgo, que a veces se actualiza en perjuicio directo de los ladrones y a veces genera daños enormes como los habidos el domingo pasado.

Expendedores de gasolina en México y refinerías de crudo en Estados Unidos venden al consumidor el producto de su rapiña. Nadie ignora la procedencia del líquido. No podría desconocerla porque el precio a que lo adquiere , y que permite las vastas ganancias, sólo es posible por tratarse de un bien ilegalmente sustraído de las instalaciones de su propietario.

El robo de combustibles es posible sólo con la connivencia de personal de PEMEX, el que posee la información sobre los puntos idóneos para penetrar los conductos. Igualmente es imputable a los responsables de seguridad de esa empresa la omisión en la vigilancia física de las instalaciones que los ladrones vulneran. Los acompañan en esta abulia integrantes de corporaciones militares y policiacas, encargadas de recorrer las regiones atravesadas por ductos a fin de impedir su saqueo. Y la cadena sigue con el conformismo de quien reconoce que se localizan y clausuran puntos de ordeña de los ductos, pero no se detiene a quienes sacan provecho de ellos.

El robo de gasolina sería muy fácil de combatir. Es un delito ostensible, cuyos preparativos y secuelas, tanto como el hecho mismo de sorber el combustible se hace con frecuencia delante de todos, en zonas pobladas surcadas por la red de distribución de PEMEX.

En todas partes una autoridad dispuesta a investigar y frenar ese latrocinio podría hacerlo. Yo mismo ha narrado y denunciado cómo no lejos de la refinería Miguel Hidalgo, en Tula de Allende, Hgo, es posible ver cómo durante la noche se forman filas de camiones cisterna sin razón social, que aguardan estacionados a la orilla de la carretera.

Y uno a uno va siendo llenado en alguna de las tomas ilegales, que no clandestinas, que abundan en la comarca.

Es voz popular a quién pertenecen esos vehículos: se trata de un ex diputado federal priísta, con aires de cacique regional, cuyo nombre no escribo porque carezco de las pruebas que lo incriminen, pero al que mucha gente identifica porque salió de su condición modesta de vida merced a los caudales que este robo le deja.

Tuve esa noticia en 1998, y la práctica ya databa de antiguo. Cuando fue secretario de seguridad pública federal y asumió directamente el mando de la Policía Federal Preventiva, Alejandro Gertz Manero organizó la “Operación Tula”, que se tradujo en detención de maleantes y disminución del saqueo. Con su salida de aquella dependencia cesó la operación, con resultados funestos: según un informe oficial de PEMEX, entre 2004 y 2009 el número de tomas se cuadruplicó, al pasar de 110 a 453.

Los directores de PEMEX actúan frente a este problema como si fueran meteorólogos, que describen el trayecto de ciclones y huracanes y no pueden hacer más que dar la voz de alarma, pues el fenómeno es inexorable. Juan José Suárez Coppel, el director actual, con motivo del crimen colectivo del domingo en la mañana reconoció que se tienen detectados decenas de puntos de ordeña. No explicó, o si lo hizo sus palabras no fueron registradas, si a cada una de esas horadaciones ha correspondido una denuncia, una averiguación ministerial, unas detenciones, unos procesos. Es probable que nada de eso haya habido. Y es de conjeturarse que no lo hubo porque las ganancias del robo de combustibles son tan altas que permiten compartirlas sin que por ello deje de ser buen negocio.

Está pendiente en el Congreso una reforma al código penal para incrementar la penalidad a este delito. La enmienda parte del criterio, no siempre corroborado por la experiencia, de que sanciones altas son disuasivas. Lo serían si se aplicaran. Pero el principal problema en este caso, como en muchos más, es que los delincuentes no son llevados a los tribunales, donde tiene eficacia la punición. Sólo de tanto en tanto se detiene a bandoleros de este ramo, porque se ejerce el pretexto de que sólo pueden ser capturados en flagrancia, cuando lo cierto es que infringen la ley desde que preparan los extractores y los vehículos hasta que venden el producto de sus latrocinios, momento en el cual la aprehensión de los vendedores podría incluir la de los adquirientes.

El tratamiento penal que se dará al estallido que quitó la vida a 28 personas y lesionó a decenas más partirá de considerarlo un accidente. La sociedad participante, que con razón se indigna por la mezcla de factores perniciosos en la gestación de esta tragedia, pronto se olvidará de ella.

‘A Calderón le compete dar soluciones, no echar culpas’ A. Villegas/A. Salmón El Diario


Tras de que el presidente Felipe Calderón emitió un mensaje vía Twitter en el que atribuyó la muerte de Marisela Escobedo a la impunidad acusando a los jueces encargados, pese a que él no atendió a la activista en su momento, legisladores, abogados y representantes de organizaciones cuestionaron esa actitud por considerar que al primer mandatario le corresponde realizar acciones y proponer soluciones, “no echar culpas”.

El presidente del Congreso del Estado, el juarense Enrique Serrano Escobar, además de tachar de oportunista la postura del Ejecutivo federal, expresó que “yo quisiera ver a un presidente dando respuestas, no responsabilizando a otros”.

A su vez, la secretaria general de Gobierno, Graciela Ortiz, dijo que no es tiempo de que las autoridades se pasen la responsabilidad.

La muerte de Marisela Escobedo, dijo, debería obligar a las autoridades a hacer un ejercicio de reflexión para ver en qué pueden mejorar en la forma en que atienden las situaciones, por lo que se pronunció en contra de que se quiera derivar lo que le corresponde a cada instancia.

“Si la primera autoridad de este país no asume su responsabilidad, pues qué esperarán las demás instancias”, declaró.

El abogado Salvador Urbina Quiroz, presidente del Consejo de Vigilancia de la Confederación Nacional de Abogados de México, comentó que la de Calderón “es una declaración desafortunada y dada muy a la ligera. Otra vez se vuelve a equivocar sin tener conocimiento del caso y sin haber analizado el expediente. Vuelve a afectar a la comunidad juarense, cuando parte de la culpa la tiene por su guerra que ha causado la impunidad y la violencia en nuestra entidad”.

El académico y criminólogo Óscar Máynez Grijalva consideró que las opiniones del presidente de la República surgen como una manera de “crucificar” a un culpable, por la muerte de la madre de Frayre Escobedo.

“El homicidio de la madre de Rubí tiene la tendencia de crucificar a alguien de inmediato, pero hay que analizar todo el proceso que llevó a que saliera absuelto el asesino. Esto (la opinión de Felipe Calderón hacia los jueces chihuahuenses) surge casi como un auto-reflejo”, mencionó.

Dijo además que los representantes del Gobierno federal siempre se han mostrado “insensibles” ante las situaciones violentas presentadas en esta ciudad, así como las autoridades que asignan a Ciudad Juárez no realizan su trabajo como debe de ser.

Alcides Flores Martínez, director ejecutivo de Ciudadanos Organizados para el Desarrollo Integral de las Comunidades (Codic), argumentó que el asesinato de Escobedo Ortiz es el reflejo de la impunidad que se vive en el país.

“Me parece que el asesinato es un reflejo de la impunidad que estamos viviendo aquí en la ciudad, en el estado y el país. Es una prueba palpable de que el sistema de justicia no está funcionando y no está siendo efectivo. Esta declaración viene a corroborar que anda mal el sistema, a nivel estatal y federal”, consideró.

La secretaria General de Gobierno indicó por su lado que el Gobierno del Estado tiene claro que requiere de la coordinación con el Gobierno federal para poder avanzar en la atención al problema que enfrenta la sociedad. Añadió que el Estado seguirá en su postura de coordinación interinstitucional.

Apuntó que la persecución de Sergio Barraza por el país le correspondía a la Procuraduría General de la República, luego de que Marisela lo localizó en Zacatecas.

Agregó que los comentarios que hizo el presidente de la República no vienen a abonar a la situación. “Tenemos clara la obligación de restituir las condiciones de seguridad, ese es el interés de seguir trabajando juntos”, dijo.

Apuntó que no es sano para el país que las autoridades se estén peleando, además de que enfatizó que la actitud del presidente no es la adecuada.

El abogado Urbina Quiroz, consideró que el primer mandatario al mencionar el “error” de los jueces que llevaron el caso del asesinato de Frayre Escobedo intenta “romper” el hilo por lo más delgado, aun cuando él mismo le negó el derecho de ser escuchada a Marisela Escobedo, quien tan sólo buscaba justicia por la muerte de su hija.

“El hilo se rompe por lo más delgado. Al mismo presidente le solicitó la señora Marisela una cita y no le concedió ese derecho legítimo que tiene cada ciudadano y le fue negada, la cual seguramente hubiera cambiado las cosas si se le hubiera atendido. Esto demuestra una vez más la falta de sensibilidad por parte del Ejecutivo del Gobierno federal, en hacer este tipo de declaraciones”, dijo.

Comentó que el problema que más afecta a esta frontera reside en el nivel de impunidad que se vive en la ciudad, pues según la versión del litigante, existe cerca del 92 por ciento de impunidad en los casos que se presentan en esta localidad.

“La impunidad que impera en nuestro país del 92 por ciento, según datos obtenidos por los mismos organismos internacionales y la Comisión Nacional de Derechos Humanos, son los que están lacerando a nuestra sociedad. Son cifras que reflejan el gran problema que tenemos en nuestro país que son la impunidad y la corrupción”, argumentó.

Indicó además que con las declaraciones de Calderón Hijosa a través de medios electrónicos, sólo se perjudica a la sociedad juarense, puesto que fueron comentarios dados a la “ligera”.

“Esto es lo que se debe atacar y no sacar chivos expiatorios, como a los jueces en este caso, para tapar la falta de atención del Ejecutivo estatal y federal. Lamentamos la declaración de Felipe Calderón que ya se ha vuelto una constante al realizar a la ligera estas declaraciones, bien es agravar más a una sociedad tan dañada como la juarense”, refirió.

Máynez Grijalva agregó a su vez que “existe mucha insensibilidad por parte del Gobierno federal, como al principio de los noventa (aludiendo a los casos de los crímenes de mujeres). Nombran fiscales federales totalmente incompetentes que ni siquiera se molestan en tratar de resolver. Los comentarios no pensados de Felipe Calderón ya son comunes, como en el caso de Villas de Salvárcar. Ahora básicamente le echa la culpa a los jueces”, señaló el especialista.

Alcides Flores Martínez expresó que el asesinato de la madre de Rubí enardeció el sentimiento de coraje que siente la comunidad chihuahuense, puesto que “hemos sido testigos de la impunidad que existe en el Estado”.

“Todos los chihuahuenses estamos molestos por esta situación y por este hecho en particular. Hay una rabia, un coraje y nos sentimos impotentes porque no se hace nada. Saber que pasa nada por parte del sistema de justicia. Estamos impunes, los delitos que se cometen quedan impunes”, recalcó.

Refirió que las declaraciones del presidente en nada benefician a la sociedad juarense, puesto que la problemática real que se vive no se está atendiendo.

“Se ha desencadenado una situación grave. De alguna manera hay cierta culpabilidad por omisión, esas declaraciones para nada vienen a favorecer el ambiente que estamos viviendo en la ciudad y lo que deberían de hacer es atender esta problemática”, expuso.