Carstens y la factura de S&P

A Puerta Cerrada

Marcela Gómez Zalce

• La percepción sobre LFC
• Continúan los saldos… negativos

El sustento del optimismo, mi estimado, es el puro terror. Estupendo el misil de una calificadora del tamaño de S&P enviándole atentos saludos a Agustín Carstens justo el día en que peinadito comenzó sus audiencias en el Senado para su ratificación frente al BdM. El tubazo contra el ex secretario de Hacienda fue para recordarle el monumental tiradero que dejó a su paso y así evitar que en el mediano plazo las facturitas de su incompetencia se le endosen completas a su sucesor, Ernesto Cordero.

Los distintivos madrazos financieros sobre la calificación negativa de México sugieren igualmente la amplia decepción sobre el desempeño del (des)gobierno de Felipe Calderónque no convenció en la adecuada aplicación de las medidas anticíclicas y peor aún, sugiere hoy una atractiva dosis de catastrofismo ante los retos económicos que deberá enfrentar el país en 2010.

La explicación es bastante clara.

En nuestra opinión se están reduciendo las posibilidades de que el país implemente una reforma fiscal sustancial u otras medidas para reforzar el crecimiento del PIB…unidas a una menor producción petrolera durante los siguientes años. Para después, amable lector, deslizar la segunda dosis de explosivos al sugerir que pese a la ganancia en eficiencia asociada al cierre de Luz y Fuerza del Centro (LFC), la empresa eléctrica en la región central del país, la nueva gestión de sus activos y las próximas concesiones de telecomunicaciones, creemos que los fuertes vínculos con la economía de EU limitará su perspectiva de crecimiento. En otras palabras, la calificadora deduce que haber borrado del mapa a Martín Esparzajustificando con el sonsonete oficial del ahorro, valió para pura madre.

Luego entonces, ya en el suelo y con los dientes rotos, my friend, S&P remata el golpe afirmando que la incapacidad del gobierno para ampliar significativamente su base tributaria y resolver las muchas lagunas y exenciones del régimen fiscal debilita su capacidad para contener la presión fiscal derivada de una menor producción petrolera, incluso si dicho descenso ocurre más lentamente que en los últimos años. En resumen: el engendro fiscal desarrollado en lo oscurito por Los Pinos, Hacienda y el PRI y que estaba meditado para justamente evitar este tipo de tubazos, fue analizado como limitado e insuficiente además de la existencia de un nulo beneficio de la duda para sacar adelante el verdadero reformón fiscal el año próximo. O sea, la percepción de la complejidad legislativa y del talento en el oficio político de estos disfuncionales no tienen suficientes fondos en el banco de los ánimos financieros, yes?

Que después de ver la mesa puesta, la vajilla completa, el vino descorchado y los manteles limpios atestiguaron horrorizados el monumental desmadre de Agustín, quien en un lapso breve tiró el vino, manchó el mantel, rompió los platos, perdió la figura, contaminó el ambiente con tanto pinche estornudo para después levantarse de la mesa sin querer pagar la cuenta.

Y justo para recordarle su factura pendiente y borrarle la sonrisa dibujada en los labios el divertido día de su planchada fiesta legislativa, S&P balconeó el monumental desastre en el manejo de las finanzas públicas en medio, también, de tanta atractiva pirotecnia y palabrería sobre el fin de la emocionante adversidad económica.

Léase para que aprendan a respetar.

Y con esta delicada calificación negativa —que se suma a la de Fitch Ratings— se abre otra página de la estupenda incertidumbre encabezada por el presumido equipo económico, que ahora deberá pagar un altísimo costo por el dinero en el mercado sin contar que se ahuyenta a la inversión extranjera, que derivará de más fuga de divisas haciendo más amplio el círculo vicioso que, of course, se tratará de matizar.

Si bien a palo dado, ni espotiza lo quita.

Felipe Calderón cierra este 2009 con saldos negativos y con una cascada de dilemas sobre el contexto del futuro o... el futuro del contexto.

El que a diario, my friend, le lanza peligrosas señales de su fragilidad.

Next!

gomezalce@aol.com